domingo, 21 de febrero de 2010

Donde Viven los Monstruos

Director: Spike Jonze
Año: 2009 País: EE.UU. Género: Fantasía/Drama Puntaje: 09/10
Interpretes: Max Records, Catherine Keener, Pepita Emmerichs, Mark Ruffalo, Max Pfeifer y Madeleine Greaves

La película, basada en el cuento de Maurice Sendak, cuenta la historia de Max (Max Records), un niño travieso y sensible que se siente incomprendido en casa y se escapa a un lugar fantasioso. Max aterriza en una isla donde se encuentra con misteriosas criaturas extrañas cuyas emociones son tan salvajes e imprevisibles como sus acciones. Hay un monstruo que se siente solo “Carol”, otro monstruo cariñoso y amable “KW”, otro malvado y que le gusta hacer de rabiar a los demás “Judith”, todos ellos representaciones de los miedos y las conductas más naturales de todos lo seres humanos, y no sólo de los niños. De ahí que la película no sea para nada una producción infantil ya que a pocos niños puede gustarle, incluso diría que les podría dar miedo. Spike Jonze ha vuelto a sorprendernos. Después de dos extrañas y estupendas películas del calibre de “¿Quieres ser John Malkovich?” y “El Ladrón de Orquídeas”, historias cocinadas en la mente genial y desquiciada de un guionista llamado Charlie Kauffman, que esta vez no firma el guión.

Cine e infancia siempre han ido bien cogidos de la mano. Utilizamos el término película familiar como eufemismo para arrastrar a los más pequeños de la casa a ver una historia que les transporte a algún lugar lejano o les haga soñar. Eso sí, pocas películas han intentado tratar la dulce etapa de la niñez de manera realista y, al mismo tiempo, con un gran alarde de imaginación. Precisamente con lo nuevo del inclasificable Spike Jonze, "Donde Viven los Monstruos", nos topamos con un ejemplo tan perfecto como particular de esta situación. Perfecto, porque sabe representar como nadie lo que pasa por la mente de cualquier niño con sobredosis de imaginación. Y particular porque el film no está destinado, en ningún momento, a los más pequeños de la casa. No está destinado a ellos por una simple razón: es una película tremendamente realista con los sentimientos humanos. Es, de alguna manera, un retrato monstruosamente cercano de la imaginación, una historia cruda de miedos reales, decepciones, alegrías. Todo un conjunto de emociones que pasan por la mente del protagonista. Jonze utiliza su brillante dirección para plasmar los monstruos (o cosas salvajes) que pululan por la isla mental de su protagonista.

Ellos también tienen miedo, también están inseguros, también dudan... son la ayuda que necesita Max (el niño actor, que lleva todo el peso de la película) para afrontar lo que se le viene encima. En ese sentido, el guión funciona a altos niveles. Las conversaciones banales e infantiles entre el niño y los monstruos son, en ocasiones, de una profundidad filosófica y, porque no, psicológica envidiable. Atención al momento en el que hablan de la muerte del sol o el sentimiento anárquico de Claire, claro referente a la personalidad hiperactiva del niño protagonista. Por otra parte, la dirección no solo acompaña el guión, sino que lo lleva más allá del cuento profundo. Spike Jonze firma uno de sus mejores trabajos de planificación, dirección y técnica. Los monstruos están ahí en todo momento, la representación de la salvajez es alucinante y la música, aunque sobre explotada por momentos, acompaña las imágenes con envidiable perfección. Es una cinta rara como nos tiene acostumbrado Jonze, el filme tiene un equilibrio perfectamente inestable entre lo racional y lo onírico, entre la mirada del adulto y las reacciones primarias, espontáneas y caprichosas de la mente infantil, lo que llena la pantalla de gozosos momentos.

Adaptar el clásico de Sendak en forma de largometraje de imagen real no es, pues, el juego más fácil que podían inventar Spike Jonze y su coguionista Dave Eggers para prolongar su nostalgia de la inmadurez. Y la película es el extrañísimo, estimulante y arriesgado resultado de una serie de decisiones que, sin duda, no serán del gusto de todos, porque “Donde Viven los Monstruos” se atreve a fundar un territorio inédito para demostrar, entre otras cosas, que otro cine infantil es posible. Por supuesto, el debate acerca de si esto es, realmente, cine para niños ya está abierto, y la única certidumbre es que, por lo menos, el espectador se encuentra ante una lectura extremadamente inteligente y personal de una obra que habla de algo tan delicado como la infancia erigida en zona de aislamiento y la imaginación transformada en jungla con corazón de las tinieblas en su justo centro. Jonze propone una estética desnuda, de cámara en mano oscilando entre lo rabioso y lo contemplativo, y captura el universo imaginario de su protagonista con la melancólica luz de las primeras horas del alba o de la insinuación del crepúsculo. El prólogo doméstico es soberbio (en especial, la escena del flirteo de la madre), pero la película conquista su excepcionalidad al abordar lo fantástico sin recurrir a ningún lugar común.

Los monstruos creados por Jonze junto a la Henson son un fiel reflejo de las criaturas dibujadas por Sendak en su libro, y es de agradecer en una época de cómoda animación digital ese aspecto retro que nos lleva irremediablemente a la gloriosa etapa de la Henson en el cine en los años 80 con películas como “El Cristal Encantado” o “Laberinto”. Pero aparte de su estética, Jonze realiza un increíble trabajo con la personalidad de estos seres, que pueden pasar de ser divertidos y afectuosos con sus juegos salvajes a causar autentico pavor y terror, ya que no son más que monstruos dispuestos a comerse a Max o unos a otros si es necesario o simplemente si les apetece. “Carol” es el eje central de este grupo de monstruos, un claro espejo de lo que es Max, un niño que se niega a crecer y abandonar su inocencia y apacibilidad, y que no duda en cogerse unas buenas rabietas como método para reclamar atención y perseverar sus estatus. El tan cuestionado por el estudio Max Records hace a mi parecer un trabajo excepcional entre tanta criatura, un niño que puede resultar insoportable por momentos e vulnerable al momento siguiente, con un toque de pícaro que parece tener respuesta para todo y al rato convertirse en un niño atemorizado por esos monstruos que parece lo van a destrozar en cuando se de la vuelta.

Spike Jonze asume el reto de hacer un producto infantil con el mismo rigor y riesgo que si fuera una película adulta de carácter indie. El norteamericano utiliza todos sus recursos para poder expresar las travesuras del chico y los juegos de los monstruos, como dije anteriormente hace una magistral uso de las preciosas y saltarinas canciones de Karen O, y consigue que Max Records esté increíblemente bien en su papel de niño travieso y algo salvaje. Posiblemente pensaban que esto podría gustar a los niños, pero no creo que lo hayan conseguido. Quizá, entre otras cosas, porque “Donde Viven los Monstruos”, a diferencia del cuento en el que se inspira, es un relato para aquellos que ya pasaron la niñez y la adolescencia. Es una cinta sobre el drama de hacerse mayores y dejar esa arcadia perdida que es la infancia. En definitiva, la nueva película de Jonze es un filme que, aunque vendido como cine para los más pequeños, interpela a aquel enano que lucha por vivir en nuestro interior cuando nos hacemos mayores. Eso sí, siempre que sea indie y cinéfilo. Como me gusta.

"Una bella y auto-indulgente fábula que todo el mundo va a adorar”

3 comentarios:

  1. Yo adoré este film, es simplemente maravilloso. La forma en que Jonze supo adaptar un relato de apenas unas cuantas páginas es maravilloso. No creo que sea para el público infantil, no obstante mi hija de 6 años con las explicaciones pertinentes la disfrutó mucho y de vez en cuando me pide reverla. Es una alegoría genial sobre el crecimiento, los dolores en la infancia, las relaciones. Muy buena reseña, super completa!

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  2. Genial Adrián, te luciste con esta entrada, respecto al filme me parecio una "obra maestra", creo que el mejor filme que a realizado Jonze, esta disfrazada como una cinta para niños, pero como dijo Pabela, con una previa explicación, posdrian disfritarla, te felicito.

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  3. Gracias por los elogiosos comentarios Pabela y Henry, en fin para mi este filme es la obra maestra de Jonze y su consolidación de este como director, esperemos que nos siga sorprendiendo más adelante.

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